Los motores de combustión interna, que son los utilizados en la mayoría de los automóviles, transforman energía calórica en energía mecánica para poner el vehículo en movimiento.
Sin embargo, los motores no pueden transformar el 100% del calor que producen en energía mecánica, por lo que es necesario contar con un sistema de enfriamiento para mantener el motor a la temperatura adecuada, lo cual nos permita garantizar un buen funcionamiento.
El sistema de enfriamiento de un auto generalmente se compone de una Bomba de Agua, Radiador de Agua, Motoventilador, Depósito Anticongelante, Termostato, Bridas Toma de Agua y Mangueras de Enfriamiento.
Estos elementos harán circular el líquido refrigerante alrededor de los componentes más calientes del motor, logrando absorber el calor y manteniendo temperatura adecuada para su función.
El sistema de enfriamiento a su vez ayudará a alargar la vida útil del motor, ya que protegerá a todos los componentes del motor de un sobrecalentamiento que pudiera generar daños graves en las piezas.
La bomba de agua hace circular el líquido refrigerante a través de las mangueras y ductos que se encuentran en el bloque del motor y la cámara de combustión, permitiendo que el líquido refrigerante absorba todo el calor, lo saque del motor y lo disipe en un radiador.
El radiador disipa el calor mediante una corriente de aire producida por el movimiento del automóvil; así mismo, el motoventilador incrementa la velocidad del flujo de aire que pasa a través de las tuberías del radiador para enfriarlo más rápido.
El termostato se encarga de regular la temperatura del líquido refrigerante, por lo que mantiene el sistema de enfriamiento del refrigerante desactivado cuando el motor está por debajo de su temperatura adecuada y activa el sistema cuando las temperaturas están por encima de las recomendadas para el funcionamiento del motor.
La revisión al sistema de enfriamiento debe ser periódica, para detectar y minimizar fallas en el sistema. Entre las fallas más comunes están: la pérdida de líquido refrigerante, aspas del ventilador dobladas, golpeadas o deterioradas, mangueras blandas o infladas y problemas generales de recalentamiento.
La recomendación es hacer una revisión cada 6 meses para automóviles de uso doméstico y cada 3 meses para autos de servicio público.
En Nikko Autoparts contamos con nuestra marca Best Cooling Línea de Enfriamiento, que te ofrece los mejores componentes que requiere tu auto para el adecuado funcionamiento del sistema de enfriamiento ¡Conoce más de nuestra marca aquí!